Porque va a emitir un juicio complicado con el que
no quiere comprometerse completamente, por miedo a la reacción del
destinatario. (Quiere tantear terreno)
Porque el destinatario goza de un mayor prestigio
social o pertenece a una clase económica superior.
Porque el enunciado corresponde a un Acto de Habla que puede amenazar
el territorio o la imagen (face) del destinatario. Por ejemplo: una
orden, una petición, un reproche, una crítica, etc.